Científicas de la UBA galardonadas con el Premio Loreal

Alicia Dickenstein y Florencia Cayrol

Durante el 23 y 24 de junio será la gala del XXIV Premio Internacional L’Óreal – Unesco, en París, Francia, donde se galardonará a las mujeres destacadas en ciencia, dentro de las cuales están la matemática Alicia Dickenstein, investigadora y docente de la Universidad de Buenos Aires, laureada por su trayectoria en 2021, y Florencia Cayrol, doctora en biotecnología por la UBA, categoría talento emergente 2022. Ellas son dos de las 10 argentinas galardonadas, 7 de las cuales son de la UBA.

El premio que las convoca es otorgado por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, conocida como Unesco, organismo especializado de las Naciones Unidas y por la compañía global L´Óréal. Con él se busca reconocer el talento, el esfuerzo y la dedicación de la mujer en diferentes ámbitos de la ciencia.

Diez argentinas han sido galardonadas con el premio desde que fuera iniciado hace 24 años, 10 entre las 3400 de 110 países diferentes. Argentina es el país de Latinoamérica con mayor cantidad de galardonadas: 7 laureadas y 3 en la categoría Rising Talent. Son premios para las disciplinas ciencias de la vida, ciencias físicas, matemáticas e informáticas.

De esas 10 argentinas, 7 fueron de la UBA. La primera argentina y de la UBA en recibirlo fue Mariana Weissman, en 2003, laureada por su trayectoria en física y nanotecnología. La segunda fue Ana Elgoyhen, doctora bioquímica y profesora de la UBA, premiada en 2009 por su trayectoria en neurociencias, en especial los principios moleculares fundamentales de la audición.

La cuarta argentina, y tercera de la UBA, fue Andrea Gamarnik, bioquímica y afamada viróloga, premiada en 2016 por su trayectoria, y en especial por sus descubrimientos sobre el modo en que los mosquitos transmiten las enfermedades, en particular el virus del dengue.

La quinta argentina fue la bióloga de la UBA Julia Etulain, quien recibió el premio en 2017 en la categoría científicas emergentes o rising talent, por su trabajo de investigación sobre optimización de la preparación del plasma rico en plaquetas para su aplicación en Medicina Regenerativa.

La sexta fue Amy Austin, investigadora y docente de la UBA de origen estadounidense, quién recibió el premio a la trayectoria en 2018 por las investigaciones sobre el impacto humano en la Patagonia, que realiza con su equipo de la Facultad de Agronomía.

Alicia Dickenstein, matemática

Alicia es doctora en Ciencias matemáticas por la UBA, especialista en geometría algebraica. Es profesora titular en la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA e investigadora superior del CONICET. Su carrera y sus premios son incontables y su trabajo, también como divulgadora científica, es conocido internacionalmente.

En 2015 ganó el premio TWAS (The World Academy of Sciences) en Matemática, que reconoce a los investigadores que impulsan la ciencia en países en desarrollo. Entre 2015 y 2018 fue vicepresidenta de la Unión Matemática Internacional (UIM), entre otras cosas.

Sus colegas, no solamente la destacan por su compromiso con la ciencia y la divulgación científica, sino también por ser una activa militante por la igualdad de género en las instituciones científicas.

Sobre su especialildad, destacó: “Todos hablamos, de alguna manera a través de las matemáticas porque es parte de nuestra capacidad de pensar, de la lógica que utilizamos en el día a día”.

Florencia Cayrol, doctora en biotecnología

Florencia Cayrol es doctora en biotecnología de la UBA, técnica laboratorista universitaria y diplomada en ciencia y tecnología. Actualmente trabaja en el laboratorio de neuro-inmuno-modulación y oncología molecular en el instituto de investigaciones biomédicas UCA-CONICET.

Sus proyectos actuales incluyen investigación biomédica básica con proyección traslacional en el futuro para su aplicación clínica en el campo de la hemato-oncología (cánceres de la sangre).

“Hoy estudio cómo el mecanismo molecular desencadenado por las hormonas tiroideas afecta la eficacia de las terapias oncológicas, incluida su actividad antineoplásica y la inmunidad antitumoral asociada”, explicó Cayrol.

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